El baño de oro no es eterno, pero con buenos cuidados tus joyas pueden acompañarte por mucho tiempo. Aquí te cuento qué hacer (y qué evitar) para que se mantengan bonitas.

Las joyas bañadas en oro son perfectas para tener diseños lindos a un precio más accesible. Pero, a diferencia del oro macizo, necesitan más cariñito para mantenerse como nuevas.
Si has notado que alguna se puso opaca o perdió un poco el color, este post es para ti.

¿Qué significa que una joya esté “bañada en oro”?

En simple:

Es una pieza de metal (por ejemplo, bronce o plata) que tiene encima una capa fina de oro.

Por eso:

• se ve como oro
• pero con el tiempo, si no se cuida, esa capa se puede ir desgastando

No es algo malo, solo es parte de la naturaleza del material. Lo importante es saber cómo alargar al máximo su vida útil.

Lo que tus joyas bañadas en oro aman 💛

1. Guardarse por separado
   • Idealmente en bolsitas individuales o cajitas suaves
   • Así evitas rayones y roces entre piezas
2. Limpiarse suavemente
   • Usa un paño suave, seco o apenas humedecido
   • Haz movimientos delicados, sin frotar con fuerza
3. Ponértelas al final
   • Primero: cremas, perfumes, maquillaje
   • Último: tus joyas Así evitas que los químicos caigan directo sobre el baño de oro.

Lo que tus joyas bañadas en oro NO soportan 🙅‍♀️

1. Ducha y piscina
   • El agua caliente, el cloro y las sales aceleran el desgaste del baño
   • Lo ideal es sacarlas siempre antes de entrar al agua
2. Perfume directo
   • Los alcoholes del perfume manchan y opacan el metal
   • Rocía el perfume, espera que se seque y recién ahí ponte las joyas
3. Ejercicio intenso
   • El sudor + roce constante no son una buena combinación
   • Si vas al gimnasio o a correr, mejor déjalas en casa
4. Limpiadores abrasivos
   • Nada de bicarbonato, pasta de dientes o productos de limpieza
   • Pueden rayar la capa de oro y adelgazarlas muy rápido

Paso a paso: limpieza rápida en casa

Una vez a la semana (o cuando las veas opacas):

1. Pasa un paño suave y seco para quitar polvo y restos de producto.
2. Si tienen suciedad más “pegada”, humedece ligeramente el paño con agua tibia.
3. Sécalas muy bien antes de guardarlas.
4. Guárdalas en estuche o bolsita individual.

Tip Amatista: evita dejar tus joyas a la vista en el baño. El vapor y la humedad constante no les hacen bien.

¿Cuándo es hora de renovar o re-bañar una pieza?

• Cuando el color original del metal de base ya se ve en zonas de mucho roce (broche, parte interna del anillo, etc.)
• Cuando por más que la limpies, no recupera el tono uniforme

En algunas joyas es posible hacerles un nuevo baño de oro. En otras, quizás ya es momento de darte el gusto con una pieza nueva 😉

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Si tratas tus joyas bañadas en oro con cariño, te van a acompañar durante años.

Quítatelas para dormir, ducharte o hacer ejercicio, guárdalas bien y límpialas con suavidad. Son detalles chiquitos que marcan una gran diferencia.

En Amatista buscamos que tus joyas no sean algo “para un rato”, sino parte de tu historia. Por eso siempre vale la pena darles un poco de cuidado extra. 🌙